33. La Familia Cristiana (II Parte)

 

 

 

El más alto amor de Dios para con el hombre se demostró con el sacrificio de Cristo, por ese sacrificio la Iglesia vino a la existencia. Entre Cristo y la Iglesia existe un vínculo de amor más santo, tierno y firme que jamás haya existido entre Dios y el hombre. Dentro del Cristianismo, el matrimonio tiene la tarea de representar sobre la tierra la imagen de esta unión entre Cristo y la Iglesia.

Una imagen de auto sacrificio, devoción y fidelidad. El matrimonio según Dios es algo más alto que un vínculo moral; Es un misterio divino (Efesios 5:32).

 

FUNDAMENTOS Y ELEMENTOS BÁSICOS QUE CONFORMAN EL MATRIMONIO (Efesios 5:21-25)


DEFINICIONES:

 

DIOS: Principio o fuente de todo orden, ley y autoridad (San Juan 1:1-4), en Dios todas las cosas subsisten (Colosenses 1:17), sin Dios nada podemos hacer (San Juan 15:5). El principio del éxito es que Dios gobierne la vida de cada uno. Si Dios no es el fundamento, el fracaso es seguro.

 

SUMISIÓN: Ante todo debe ser mutua "Someteos unos a otros". Es un acto de redención y entrega sin reservas del uno para el otro, ser transparentes (Génesis 2:25) es el conocimiento no solo de dos cuerpos sino también de dos almas que se van "fundiendo en una" hasta llegar a ser "una sola carne", una unidad de cuerpo, alma y espíritu.

Orgullo, celos, autosuficiencia y desconfianza; son enemigos de la sumisión…

 

SUJECIÓN: Es el orden de Dios para las esposas. Esta palabra puede producir pensamientos negativos tal vez por ignorar su correcto significado y propósito. Sujeta no significa jamás "ser una alfombra para los pies". Para Dios significa obediencia, humilde e inteligente a un poder o autoridad ordenados y cita como ejemplo la sujeción de la Iglesia a Cristo. Lejos de ser degradante, Dios estableció la sujeción como principio para protección y armonía (Efesios 5:22-24), Cristo es el mejor ejemplo (Filipenses 2:5-9).

Sujeción es un medio de protección en lo físico, emocional, psicológico y espiritual (Efesios 6:12). Es también un medio de equilibrio social y un medio de poder espiritual (San Mateo 23:12).